10:30 de la mañana del domingo 11 de Abril. Carretera de Algete. Una unidad de la guardia civil de tráfico se encontraba realizando controles de alcoholemia entre los conductores. Todo estaba en orden hasta que a las 10:43 dieron el alto a un vehículo de tracción motora, rojo, conducido por dos personas, una en cada volante.
“La primera duda que tuvimos fue: ¿A quién le hacemos el control, al conductor A o al conductor B?” señaló uno de los agentes. “Veíamos algo raro pero no alcanzábamos a detectar lo que era” afirmó el segundo agente.
Tras un desayuno formado por 43 torrijas, 2 vasos de leche de vaca y unas judías verdes –la verdura es importante en la dieta-, decidieron que debían soplar los dos conductores.