viernes, 18 de febrero de 2011

NUESTRA CABECERA HA SIDO RECUPERADA!!!!

Después del disgusto que nos llevamos al sufrir el robo de la cabecera recién estrenada, hoy nos llevamos una pequeña alegría al saber que está sana y salva.

Varias personas se han puesto en contacto con nosotros afirmando haberla visto en la playa sin ningún signo de violencia o desperfecto. Volaba a la cola de una avioneta publicitaria, haciendo las delicias de bañistas y domingueros. Después se perdió la pista hasta que algo sucedió. Esta vez, algo bueno.

Una valiente ama de casa ha conseguido recuperarla y reducir a los ladrones.


Josefina, cuyo nombre de nacimiento es Mª Teresa, se hallaba comprando la aceituna rellena cuando, por el rabillo del ojo, observó, vislumbró una silueta que le resultaba familiar. En un primer momento pensó que era su marido, pero en un segundo momento dijo para sí misma, “no tengo marido… cachis…tengo que echarme uno”. “Lo vi claro, cuando supe que no era mi marido, lo vi claro, supe que era la cabecera perdida, lo vi claro…si...” señaló con una claridad excesiva, quizás.

Una vez hubo abonado el bote de olivas se prometió a si misma que no volvería a confundir una cabecera de blog con un marido, y así lo hizo. Hasta hoy jamás ha vuelto a hacerlo. Con la promesa sobre la mesa, Josefina ya pudo ir a dar caza, a capturar a los ladrones. No lo hizo. Se sintió mal. Pensó en hacerlo. No lo hizo. Volvió a sentirse mal. Se comió las aceitunas. Le soltaron el estómago. Apretó. Persiguió.

Corrí todo lo que pude tras ellos, insultándoles y eso…cabrones, les dije”

Todo parecía perdido dada la velocidad de los ladrones, muy superior a la de Josefina. Todo parecía inútil hasta que uno de ellos giró la cabeza para mirar a la ama de casa, para tantear su belleza. Craso error. La mujer corría como buenamente podía, apretando para controlar su estómago, sin hacer movimientos bruscos. Cabeza inclinada. Arrastrando los pies y con los brazos semi rígidos se balanceaba hacia los lados, primero uno, luego el otro. La cara, un poema de Hitchcock. El cuerpo, otro poema de Hitchcock.

Semejante imagen no pasó desapercibida para los maleantes quienes fruto de un ataque de pánico soltaron la cabecera para ganar en ligereza y poder huir. A día de hoy se cree que siguen corriendo bordeando la ría de Vigo presos de la histeria, siempre respetando una longitud de zancada adecuada, así como una buena pisada que no dañe su espalda. "La salud es lo primero" afirmaron a través de un sms.

Hay que agradecer a Josefina que recuperase la cabecera y nos la mandase vía transporte urgente. En las próximas horas procederemos a su recolocación.

Como recompensa nos ha pedido que le pongamos una canción con la siguiente dedicatoria para su hija Remedios. “Hola hija, soy tu madre”.

Por si alguien no se enteró del robo, aquí está la noticia http://lanoticiaesnuestra.blogspot.com/2011/02/nos-han-robado-la-cabecera-nueva.html

3 comentarios:

  1. Espero, deseo que la buena mujer despues de aquel despliegue de medios encontrara un baño en condiciones optimas con papel adecuado, por supuesto!!!! Jajajaja

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  2. jajaja, quien sabe si lo encontró o no...

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