viernes, 2 de octubre de 2009

Once penaltis en un partido

Este acontecimiento tan sorprendente e inesperado sucedió en un partido de fútbol de categoría infantil.

Ni corto ni perezoso, el árbitro, señor Williams Domingo, señaló la nada desdeñable cifra de once penas máximas durante el tiempo reglamentario. Los 3 primeros fueron favorables al equipo local, por lo que la hinchada coreó su nombre durante minutos. Los ánimos cambiaron unos minutos mas tarde cuando pitó el primero en contra del equipo de casa y, sobre todo cuando, con el marcador 4-3 ,no dudó en señalar el punto blanco tras una brutal entrada al extremo izquierdo visitante. Con el empate a cuatro y seis penaltis en su haber, el árbitro deleitó a los congregados en el estadio con tres disparos más desde los once metros.

El resultado final fue un vistoso 7-5 que, todo sea dicho, dejó contentos a ambos equipos. Tras el pitido final, los veintidós jugadores así como los entrenadores, fueron uno tras otro a felicitar al colegiado por su labor, unos con más ironía que sinceridad, pero la hazaña no era para menos.

La única declaración del Sr Williams fue en defensa de si mismo y de su profesión,

“Yo pito lo que veo, esto es una profesión muy difícil y poco respetada" También confesó ante nuestros micrófonos que disfruta de los penaltis,”siempre he sido un gran amante del penalti y de su ejecución”.

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