martes, 20 de octubre de 2009

Vuelve la fiebre del oro

Vuelve la fiebre del oro. Eso afirma un fabricante de filetes de pollo, después de que en uno de sus productos se encontrase una pepita del preciado metal dorado. Desde entonces sus ventas se han elevado un 2300%, en tan solo cuatro meses.

El afortunado consumidor que encontró la pepita no dudó en informar a todos los medios de comunicación de su hallazgo para, palabras textuales, “que otros puedan correr la misma suerte que yo en estos tiempos de crisis económica”.

Ninguno de los responsables sabe a ciencia cierta como pudo aparecer una pepita de oro en uno de sus filetes. Por su parte, el director de la empresa ha encontrado sin querer un reclamo publicitario mejor que ningún otro que hubiera podido pensar el responsable de marketing. “A raíz de estos acontecimientos, hemos creado El pepitazo, un concurso para ver quien encuentra la pepita de plástico mas grande dentro de un filete. Al ganador se le premiará con una pepita con el mismo tamaño y forma que su mascota.”

En estos momentos especialistas en yacimientos de oro se encuentran estudiando el lugar donde se encuentra situada la fábrica, debido a su ubicación cercana a una vieja mina de oro de la cual podría proceder ese pequeño trozo. En caso de confirmarse la presencia de dicha mina, el patrimonio de la compañía aumentaría hasta unas cifras absolutamente inesperadas e insólitas para una empanadora de pollos, lo cual situaría a la empresa entre las cuatro grandes del país.

El subdirector adjunto nos habló del caso. “Estamos muy contentos por este descubrimiento pero muy nerviosos a la vez, ya que en caso de tener una mina de oro activa en nuestro terreno, podríamos crear un nuevo concepto de fábrica que desde hace años queremos implantar en la sociedad. La primera mejora será incorporar a nuestras instalaciones un local de streaptease para empleados y empleadas, sin distinción alguna por sexo o edad, donde puedan practicar el arte de desnudarse al son de la música, al compás de los mariachis, mientras se ganan unos dólares a costa de sus compañeros. Creemos que será un cambio bien recibido y que pondrá a nuestra compañía un peldaño por encima del resto, en cuanto a comodidades se refiere.”

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